Hola a tod@s! Os traemos de nuevo un post dedicado a un lugar muy especial de nuestra ciudad: la famosa Plaza del Potro, pero ¿por qué recibe ese nombre? Seguro que much@s de vosotr@s tenéis respuesta a esta pregunta y diréis “pues por el potro que corona la fuente de la plaza” pero ¿estáis seguros? La realidad es bien distinta a lo que, por el paso del tiempo y el desconocimiento, se ha tomado como verdad. Prometemos que en este post os vamos a descubrir el verdadero motivo de su nombre pero antes, como siempre, vamos a situarnos con un poco de su historia.
Esta popular plaza se encuentra situada en el barrio de San Francisco-Ribera. Originalmente tenía planta cuadrada y estaba cerrada por sus cuatro lados. Sin embargo, el aspecto que posee hoy en día, rectangular y abierta, se debe al paso del tiempo y las diferentes necesidades que ha ido teniendo la ciudad. Por eso, el primer gran cambio en la plaza tiene lugar en el siglo XV, cuando la Hermandad de la Santa Caridad de Nuestro Señor Jesucristo con el apoyo, entre otros, de los Reyes Católicos, deciden construir el Hospital de la Caridad cuyo edificio alberga hoy en su interior el Museo de Bellas Artes y el Museo Julio Romero de Torres. En la década de 1870, la Posada de la Madera, que estaba situada al sur de la plaza, es cerrada, expropiada y posteriormente demolida por el ayuntamiento para dejar la plaza abierta hacia el rio.
La fuente, protagonista indiscutible de la plaza, fue construida en 1577 y se ubicó en el lado sur, lado contrario al que se encuentra en la actualidad, justo donde encontramos el Triunfo de San Rafael. En 1874 se traslada la fuente al lugar que ocupa hoy y se corona con un potro. En 1924 se traslada, desde la Plaza del Ángel, el Triunfo de San Rafael que hoy vemos al sur de la plaza que nos ocupa, quedando desde entonces con el aspecto con el que la vemos hoy en día.
Pero lo prometido es deuda y sabemos que estáis deseando saber el porqué de su nombre así que allá vamos. En cuanto a la denominación de Plaza del Potro, es lo más fácil y común pensar que viene de la famosa fuente y el potro que la corona, pero la realidad es que en las inmediaciones de la plaza se celebraba, en la Edad Media, la Feria del Ganado y en la plaza es donde tenía lugar la venta de caballos, de ahí el nombre que recibe y de ahí también la escultura que culmina la fuente.
Para terminar con nuestro post os queremos también hablar de un hecho muy importante en la historia de esta plaza que no todo el mundo conoce y que es el motivo por el que los cordobeses le tenemos un cariño especial a esta plaza: la relación directa de Cervantes y la Plaza del Potro. En la fachada del antiguo Hospital de la Caridad podemos ver un gran azulejo que reza así: “El Príncipe de los Ingenios de España, Miguel de Cervantes y Saavedra, de abolengo cordobés, mencionó este lugar y barrio en la mejor novela del mundo. Varios cordobeses con amor de paisanos y con veneración de españoles, dedican este humilde recuerdo al insuperable escritor”.
Miguel de Cervantes nombra esta plaza en El Quijote y lo hace porque vivió aquí durante mucho tiempo ya que su padre trabajó como cirujano en el Hospital de la Caridad. Está en nuestra ciudad hasta 1557, tras la muerte de sus abuelos se marcha pero volvió en varias ocasiones, hospedándose en otro de los edificios emblemáticos de esta plaza, la Posada del Potro, hoy en día Centro Flamenco Fosforito.
Estar en esta plaza y saber que Cervantes vivió, jugó y se hospedó en ella hace que uno se sienta en un lugar realmente especial e importante y esto hace que los cordobeses sintamos un gran orgullo.
Esperamos que este post os sirva para conocer un poquito más de nuestra ciudad. Podéis enviarnos cualquier duda o apunte a info@qurtubavisitasguiadas.es estaremos encantados de leeros y responderos. ¡Os esperamos!
Saludos!
Autor/a: Alba Mª Pino Molina