Las Caballerizas Reales de Córdoba

Las Caballerizas Reales de Córdoba son, sin duda, otro de los elementos que no debes perderte si visitas la ciudad. Declaradas Monumento Histórico Nacional en 1929.

En el año 1570 fueron fundadas, mediante real decreto, por el rey Felipe II, gran amante de los caballos, con la intención de crear y criar una de las mejores razas de la historia: el Caballo Andaluz, nuestro Pura Raza Español, para él mismo y para servicio de la Casa Real.

Esta raza llegó a convertirse en un símbolo del imperio español.

Don Diego López de Haro y Sotomayor, el caballerizo mayor del rey, fue el encargado de las obras de construcción. Eligió construirlas junto al Alcázar de los Reyes Cristianos y, desde entonces, se han utilizado ininterrumpidamente para la cría del caballo cordobés.

En 1842 se convirtió en cuartel de la caballería y se instaló allí el tan importante 7º depósito de Sementales del Ejército, hasta 1995.

Más de un centenar de caballos andaluces y árabes de excelentísima calidad estuvieron en estas instalaciones y eran utilizados para la doma, los carruajes y para inseminar yeguas de propiedad militar y civil.

Por desgracia, en el siglo XVIII las caballerizas quedaron destruidas tras un terrible incendio. Estas fueron reconstruidas durante el reinado de Fernando VII y, años después, terminadas por el monarca Carlos III.

Se trata de un gran edificio de planta rectangular cuyas cuadras son salas abovedadas. Poseen un extenso patio central desde el cual se reparten diferentes salas. Es llamativa la cuadra principal consistente en un enorme espacio abovedado cuyas columnas de piedra separan los diferentes boxes, situados a ambos lados, para los caballos. García Lorca dijo de este edificio que era “una Catedral para los caballos”. Destacan también el picadero, el torreón y los jardines.

En estas Caballerizas Reales es donde tienen lugar los espectáculos y bailes ecuestres en Córdoba capital. En la actualidad, las Caballerizas Reales acogen un espéctaculo fascinante de una calidad y belleza exquisitas y, por supuesto, recomendadisimo, en especial para los amantes de los caballos y del flamenco: el Espectáculo Ecuestre “Pasión y duende del Caballo Andaluz”.

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Autor/a: Alba Mª Pino Molina

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